Las posibilidades de preparación del té frio son casi infinitas, hasta el punto de que puede sorprendernos el uso de ingredientes poco habituales. Esta propuesta de origen tailandés que te ofrecemos es tan original como refrescante.
Comúnmente imaginamos los tés helados como ligeros y refrescantes. Sin embargo, si nos apetece también podemos hacer recetas más consistentes añadiendo un elemento cremoso, como la leche evaporada, leche de coco, nata, mantequilla, etc.
Cuando se usan este tipo de componentes hay que aportar un poco más de hojas de té de lo habitual, ya que los ingredientes densos y el frio tienden a suavizar el sabor.
A una base de té Oolong (también llamado té azul, es una variedad parcialmente oxidada y descrita a menudo como entre el té negro y el verde) añadiremos un jarabe de jengibre y cúrcuma para aportar un sabor brillante y un toque de color. La leche de coco añadirá cremosidad y aroma.
Esta receta es muy personalizable por lo que si deseas más azúcar, cúrcuma o jengibre y más o menos crema, no hay problema. Siéntete libre de jugar con las proporciones e incluso añadir algún elemento más a tu elección.
El té Oolong helado con coco puede convertirse en tu nueva bebida favorita para este verano.
Ingredientes (para un vaso grande):
170 ml. de té oolong de buena calidad, elaborado y refrigerado
2 cucharaditas de jarabe de jengibre y cúrcuma
60 gr. de leche de coco
Jengibre crudo para adornar
Abundante hielo
Elaboración del jarabe:
1 taza de jarabe simple
1 cucharadita de polvo de cúrcuma (opcional)
1 trozo de jengibre crudo pelado, cortado en rodajas finas
Instrucciones:
Para hacer el jarabe agrega a partes iguales azúcar granulada y agua en un cazo. Calienta y remueve para disolver el azúcar. Agrega la cúrcuma y 1 trozo de jengibre pelado y cortado en rodajas finas. Revuelve bien para combinar. Enfría, cuela y reserva.
Para hacer la bebida mezcla el té Oolong, el jarabe y la leche de coco juntos. Si lo prefieres, puedes utilizar una coctelera o una batidora de baso, así obtendrás una bebida más espumosa. Agrega mucho hielo a un vaso grande y vierte sobre él la mezcla de té. Adorna con una tira de jengibre crudo.